Las medidas que ha aprobado el
Gobierno probablemente sea la mayor batería de medidas sociales aprobadas por
un Gobierno en España, algo especialmente meritorio en un contexto de crisis
brutal como este. Unas medidas ambiciosas que me recuerdan al acuerdo presupuestario
que Unidas Podemos logró arrancar al PSOE y que motivó, entre otras cosas, la
subida del SMI a 900.
En este caso, destaca el apoyo a
los autónomos, a las trabajadoras del hogar y a las familias vulnerables.
Apoyos, sin duda, insuficientes, pero apoyos. ¿Cuándo antes un gobierno, en un
contexto de crisis económica, había aprobado una batería de medidas para
defender a los más golpeados por la crisis? Era precisamente al revés, las
medidas del Gobierno (PSOE o PP) lo que hacían era golpear todavía más a los
más vulnerables.
Las medidas son claramente
insuficientes para abordar todo el impacto de esta crisis. El “escudo social”
del que habla Unidas Podemos va a proteger a algunas familias pero no a
todas, o al menos no lo suficiente. Los autónomos y pequeñas empresas están
recibiendo apoyo del Gobierno como nunca antes lo habían recibido pero aún así
este apoyo no basta, y me temo que muchas van a terminar quebrando o como mínimo
a sufrir un golpe muy duro. Necesitan sin duda un mayor apoyo.
Ahora bien, hay que destacar dos
cuestiones. La primera es que se trata de un gobierno de coalición, con una
parte que apuesta por el recetario neoliberal clásico (Nadia Calviño sobre todo
pero en general los ministros del PSOE) y otra parte que defiende medidas a
favor de la gente más afectada (Unidas Podemos). La segunda es que el
presupuesto del Gobierno no es ilimitado, y han sido muchos años de políticas
neoliberales que han menguado la capacidad de actuación de lo público.
Curiosamente, muchos de los que han estado durante años pidiendo bajadas de
impuestos, ahora piden ayudas públicas. Contradicciones de los neoliberales
cuando llega una crisis.
Una de las medidas más relevantes
es la posibilidad de los inquilinos a pedir un préstamo al ICO para pagar el
alquiler. Una medida que finalmente ha sido algo intermedio entre lo que
hubiera preferido el PSOE (nada o casi nada) y lo que hubiera querido UP
(suspensión del pago de los alquileres, con apoyo público a aquellos
propietarios que realmente necesiten de esa renta para llegar a final de mes).
Pero este tema es tabú para el
PSOE, quien se considera especialmente cercano a esos cientos de miles de
caseros que tienen varias viviendas en alquiler y a los que no quieren
perjudicar. Estos días hemos podido escuchar a los ministros socialistas
(Calviño, Abalos…) repetir machaconamente que el 85% de los caseros en España
son pequeños propietarios que también necesitan esas rentas para vivir. Como si
fuera comparable la situación económica de estos caseros con las de sus
inquilinos, al menos en el 99% de los casos. No es casualidad que, por ejemplo,
el presidente de la recién creada asociación de propietarios de viviendas de
alquiler sea un Joan Clos, ex alcalde de Barcelona por el PSC y ex ministro de
industria de Zapatero.
En algún momento habrá que meter
mano al patrimonio en este país. No todo se puede cargar sobre las empresas,
los autónomos, los trabajadores y el Estado, todos ellos muy afectados por esta
crisis. Los que viven de las rentas de su patrimonio, ya sean clase media-alta,
ricos o muy ricos, también van a tener que aportar algo en algún momento. De
momento, el Gobierno no ha dado ningún paso en este sentido, pero deberemos
presionarle para que así sea.
Comentarios